El Rancho Luna es un hotel de playa todo-incluido, de 222 habitaciones, que se alza en las afueras de Cienfuegos, a 18km del centro de la ciudad.

No es un hotel moderno, definitivamente ni sofisticado ni chic. La propiedad en general está necesitada de una reforma, y en especial a las habitaciones, donde se nota la falta de mantenimiento en los aires acondicionados, mobiliario, puertas...Pero están limpias y algunas ofrecen vistas al mar.

El servicio y la gastronomía son corrientes. Los cócteles se sirven en vasos plásticos y no siempre habrá mojitos disponibles, especialmente los fines de semana cuando muchos cubanos visitan el hotel por lo que puede estar algo atestado y el servicio puede decaer; entre semana sin embargo suele estar tranquilo...quizás demasiado tranquilo para algunos huéspedes.

Rancho Luna no es un hotel para los que busquen irse de fiesta. Hay animación de día y de noche como parte del paquete todo incluido, pero la mayoría de las actividades tienen lugar durante el día en la piscina y la playa. Además de esto y del delfinario no hay mucho que hacer en las noches por lo que llevar juegos, libros y música sería una buena idea.

La principal atracción aquí es el buceo y el esnórquel. El hotel ofrece clases de iniciación y el centro náutico, que da cursos y otorga certificados, está a corta distancia. Hay cerca de 32 sitios de buceo incluyendo cavernas, barcos hundidos; abundante vida marina e impresionantes jardines de coral. Además, de Noviembre a Febrero, inofensivos tiburones ballena frecuentan estas aguas.

La playa queda a corta distancia y es agradable, pero no es la típica playa perfecta de arenas blancas que uno se esperaría en el Caribe.

La piscina es muy agradable además de ecológica, pues es de agua salada.

En el buró de turismo se ofrecen excursiones a La Sierra del Escambray, a Trinidad y otros sitios de interés turístico. Muy recomendado.

Pero casi obligatoria es una visita a la ciudad de Cienfuegos, cuyo casco histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2005.

A tener en cuenta: El hotel tiene una tienda que vende agua, cerveza, ron, bañadores, etc... pero es la única en las proximidades. Por ello uno debería llevar todo aquello que pudiera necesitar: toallas de playa, artículos de aseo personal, comidas ligeras...